4/07/2008

MARIBEL Y LA EXTRAÑA FAMILIA, MIGUEL MIHURA



MARÍA RENÉE BATLLE


ARGUMENTO

Marcelino es un hombre que no tiene éxito con las mujeres. Su antigua mujer, Susana, había muerto en un lago de su propiedad. Marcelino busca a una nueva y buena esposa. Entra en un bar y la primera que vé y le sonríe es Maribel. De ahí que la invita a visitar su casa donde se encuentran su mamá y su tía Paula.

Maribel no sabe a qué va. Quizá por su profesión de prostituta, piensa que va a tener un devaneo con Marcelino, pero su sorpresa fue grande, cuando la tía y la madre la ponen al tanto de sus intenciones: una boda con Marcelino. Maribel se queda estupefacta; al principio quiere huir, pero cada vez se le va haciendo más difícil.





Maribel piensa que ha entrado en una familia de locos, pero cuando llega el médico de la familia y le da muy buenas referencias de ellos, cambia de opinión y termina aceptando los planes matrimoniales.

Compañeras de profesión llegan a presentarse a la casa de la familia A pesar de sus indiscretas vestimentas, las aceptan en aras de su modernismo. Estas piensan que la familia está hurgando un plan para matar a Maribel, de manera que la acompañan a una propiedad campestre, cuando Marcelino le propone a Maribel pasar ahí unos días, antes de la boda.

Las sospechas de las amigas se las transmiten a Maribel. Piensa que sería mejor decirle la verdad sobre su vida pasada, sin embargo, cuando lo intenta, Marcelino evita el tema. Llegan a la propiedad, la tía y la madre y vuelven a acoger a Maribel con la misma hospitalidad.

COMENTARIOS PERSONALES

Es una comedia contemporánea (siglo XX) y pertenece al teatro del absurdo. La acción se lleva a cabo en Madrid, en un pueblo de las provincias. La obra está escrita en tres actos. Los personajes principales son Marcelino y Maribel, sin embargo, la tía Paula y Matilde la madre, sí tienen papeles protagónicos.

Personajes secundarios serían las amigas de Maribel: Niní, Rufi y Pili, así como Don José el administrador y don Luis, el médico de la familia.

A Marcelino lo pintan como a un joven señor sin carácter. La madre y la tía le manejan la vida a su antojo. Es hijo de mamá. Ha sido mimado, consentido y por eso mismo, no puede por él mismo tomar decisiones serias. Ante la súbita atracción que siente por Maribel, no puede tomar la determinación ni de casarse, ni de declararle su amor. Tienen que ser la madre y la tía quienes intervienen y prácticamente se le declaran en ausencia de las palabras del hijo y sobrino.

Maribel es una prostituta, pobre, mal educada, de origen modesto. Le parece locura que miembros de la burguesía le estén proponiendo matrimonio para el hijo y sobrino. Una prostituta como ella no tiene derecho a tal propuesta. Por eso mismo, le parece que la familia está loca. ¿A quien se le ocurre que una prostituta sea digna de tales elogios? Al principio, se niega ante las peticiones, pero al ir tratando a la familia, accede e incluso se siente enamorada, honrada y dispuesta a cambiar de vida. Es tan sorpresivo, que les toma cariño, las cuida, aprende a tejer, su vocabulario se vuelve más educado.

Maribel es una joven mundana, contrario a Marcelino quien no ha tenido mundo. La madre y la tía se presentan como dos viejas anticuadas que añoran la modernidad. Ellas nunca tuvieron ni la oportunidad ni la valentía para cambiar de vida. Conocer a una chica como Maribel, las hace remontarse a esos deseos de vivir que nunca se les concedió. La “locura” de la familia está en no poder ver lo obvio, o sea, que Maribel no es moderna; su modernismo va más allá, porque es una mujer disoluta. O son ingenuas o tienen una razón oculta, misma que se da a entrever en el segundo y tercer acto.

Las amigas de Maribel se comportan como son, con el lenguaje vulgar y la vestimenta inapropiada, por lo que se sorprenden del cambio tan repentino de la conducta de Maribel.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Comedia de enredos que se basa en La Cenicienta (que sale de lo más bajo y triunfa).La obra tiene la virtud de la contención, se mueve en la fronter del melodrama, pero el autor sabe salvar los riesgos.Trasmite el mensaje de que la sociedad fuer mejor si no envileciera a los individuos y los valorara por su interior en vez de su apariencia. Maribel descubre la bondad, que es lo que la redime, es símbolo de vivir sin tener miedo a los demás

Luceta

Azpeitia poeta y escritor dijo...

También la ví en su día, esta vez den San Sebatián....Has estractado muy bien el contenido y el simbolismo de la obra...un beso desde azpeitia